Me quedo mucho más tranquilo.

 

Hoy, las portadas nacionales de todos los periódicos y televisiones, públicas y privadas, han iniciado sus portadas e informativos mostrando los “incidentes” acaecidos en diversos puntos de la geografía Española, cientos de personas se han echado a la calle para protestar violentamente, en casi todos los casos.  

Según han informado los medios de comunicación, su protesta es contra las últimas medidas adoptadas para frenar el número de contagios en nuestro país, como por ejemplo la restricción de la movilidad nocturna, o el cierre temporal de las empresas de ocio nocturno, que como también apuntan los medios son el mayor foco de contagio de estas últimas semanas. Sobre las personas que han participado en estas protestas, los medios han informado que son todos jóvenes anti sistema y/o de extrema derecha perfectamente coordinados y utilizando tácticas de guerrilla Urbana.

Particularmente me quedo mucho más tranquilo, pues si bien es por todo el mundo sabido que en cualquier protesta/manifestación siempre hay grupos de los mencionados anteriormente que van a reventar, literalmente, cualquier tipo de acción social, convirtiéndola en un campo de batalla, de destrozos y de saqueos como mostraban las imágenes de los informativos de lo ocurrido la noche pasada, me quedo mucho más tranquilo de que las personas que han salido a protestar no sean ciudadanos de a pie, de los que hasta el último momento han estado pagando religiosamente sus impuestos, de los 150.000 que han estado meses sin cobrar los ERTE, de los cerca de 100.000  bares que han cerrado, del millón de autónomos que han cesado su actividad, de los miles de medianas y grandes empresas que han tenido que hacer ajustes, despidos, ERES, ERTES, cierres;  de los miles y miles de personas que han pasado de vivir del fruto de su trabajo a tener que usar los servicios sociales y vivir de la beneficencia, de los millones de personas que viven sumidas en la incertidumbre y que no saben que será de ellos mañana.

Me quedo mucho más tranquilo sabiendo que los disturbios (vamos a llamar las cosas por su nombre), según los medios, proceden de 4 desarrapados, criminales, anti sistemas, fascistas y otras calañas, que están en contra del toque de queda, porque, sinceramente, veo difícil de explicar que estén perfectamente coordinados y utilicen tácticas de guerrilla urbana; una Madre con su hijo en brazos, al que no tiene que darle de comer; un señor mayor que tiene miedo a morir en una residencia como ha muerto su mujer, sin ser trasladada al hospital y sin poder ni él ni sus hijos asistir a su entierro; o un ciudadano corriente hundido y perdido, porque se desvanece su libertad, su democracia, su constitución, su seguridad jurídica, y todo ello sin recibir ninguna explicación, y lo que es peor, ningún atisbo de solución, por parte de los que deben de darla, que ni están ni se les espera.